La altura es un indicador importante de la salud, el desarrollo y el estado nutricional general de los niños, y se ha estudiado que aquellos que se alimentan con leche de vaca diariamente son más altos que los que lo hacen con jugos vegetales.
Para el estudio publicado por Oxford Academic, The American Journal of Clinical Nutrition, Vol. 106, N°2, se tomó una muestra relativamente grande, 5034 niños urbanos sanos en edad preescolar. Los datos sobre las mediciones antropométricas y numerosos factores clínicamente relevantes como la altura materna y el origen étnico permitieron el ajuste de posibles márgenes de error, y la correlación entre el consumo de leche de vaca y la altura fue consistente. Se identificó que los niños que evitan la leche de vaca son más pequeños, porque no reciben suficientes proteínas y demás componentes para apoyar un óptimo crecimiento.
El grupo de niños de 3 años que consumió bebidas vegetales tuvo menor estatura hacia sus 4 años (IC del 95%: 0.2, 0.5) o ∼1.5 cm menos (IC del 95%: 0.8, 2.0 cm) en relación con los niños de la misma edad que consumieron leche de vaca.
Muchos padres hoy, por confusión propia o por recomendación de profesionales de la salud más amigos de la ideología que de la ciencia, están reemplazando la leche de vaca con bebidas a base de soja, arroz o almendras, que contienen proteínas diferentes a las de la leche de vaca y carecen, entre otras cosas, de IGF-1 que es un estimulante de la hormona del crecimiento, que promueve el desarrollo celular óseo y de otros tejidos.
Comprender cabalmente la diferencia entre los componentes de una bebida vegetal y la legítima leche, y cómo influyen en el crecimiento podría ayudar a los padres, los médicos y los responsables de la salud pública a debatir a ciencia cierta, el tipo óptimo de alimento para los niños y trabajar para evitar confundir a la población con denominaciones equívocas y recomendaciones viciadas de sesgo ideológico.
Existen muchas bebidas vegetales que no son leche, que se comercializan como productos lácteos para niños, y su contenido nutricional no está estandarizado como sí lo está el de la leche de vaca por la FDA y las Regulaciones de Alimentos y Medicamentos de Canadá, que es dónde se realizó este estudio. El USDA MyPlate y Canadian Food Guide reconocieron que las “alternativas” vegetales no proporcionan la misma energía, proteínas o vitaminas y minerales que se encuentran en la leche de vaca, para ser más gráficos, 2 tazas de leche de vaca contienen 16 g de proteína, que es el 70% del requerimiento diario para niños de 3 años. Mientras 2 tazas de bebida de almendras, contienen 4 g de proteína, solo el 25% del requerimiento diario para este grupo etario.
Valeria Guzmán Hamann
EDAIRYNEWS